CAPÍTULO I (Piloto)

Como ya dije, habría pronto una nueva sección llamada Continuará... que serviria para escribir una historia entre todos. Pues bien, este es la primera parte que escribe el webmaster de éste blog, o sea yo, un capitulo piloto (es decir el de arranque), y los lectores, o sea vosotros, iréis escribiendo el resto. Aqui está el capítulo I:

Esta historia comienza en el año 1987 cuando Helios, un niño rubio de las afueras de Roma, se dirige al primer día de clase de su nuevo colegio. Helios está muy preocupado porque no conoce a sus compañeros, ni si quiera se será bien aceptado. Por el camino, se topa con  unos adolescentes, que tienen pinta de ser muy gamberros, y de un arrebato, le hurtan la bolsa donde lleva sus libros. En el momento que Helios se da cuenta, se gira atrás y ve a los jóvenes huyendo.  En un instante piensa, “¿voy o no voy?”, pero decide perseguirlos, ya que no quiere presentarse el primer día sin libros. Corre tras ellos, pero éstos tienen las piernas más largas, y Helios no puede alcanzarlos. Los adolescentes, giran adentro de un callejón, donde también se dirige Helios. Sorprendentemente, el callejón parece desierto, y él los busca. Al no encontrar nada, piensa que puede que se escondieran tras la única puerta trasera que hay allí. La abre, y por un momento deja de ver a causa de la cantidad de humo que salía. Entró en una habitación llena de velas y velos, sin muebles, sólo una mesa pequeña circular en el centro, dónde había un gran libro gordo de piel, que Helios se arrimó a coger.-¡No toques mi libro de mi mesa de palisandro!-Yo solo…-¡Silencio niño! Siéntate.-No hay sillas.-No hacen falta.Helios se sentó en el suelo, un poco confuso, junto a la mesa. El extraño hombre, un anciano con barba gris, aunque no muy larga, le preguntó que hacía husmeando en su casa. Helios le conto que llegó allí, después de perseguir a unos niños que le habían robado la bolsa, y el anciano le indicó que abriera un baúl que había en el fondo de la sala.-¿Pero como…? – dijo cuando abrió en baúl.-Sácalo.-¡Es mi…!- Helios estiró el brazo y sacó del baúl, la bolsa con los libros que le habían robado los niños.-Gracias.-le agradeció Helios.-Corre, ves a clase, te están esperando. Nos veremos pronto.

Podéis descargar la versión .doc pusa aquí

Si queréis colaborar (sólo después de que se publique la primera parte), enviad un e-mail a [e-mail] con un texto de hasta 500 palabras para que yo lo publique en el blog. ¿Como acabará esto? Recuerdo que el tema será libre, mientras no contradiga lo anterior de la historia.